domingo, 7 de agosto de 2022

Gris IV


El día de ayer tuvimos una despedida... o no se como llamarle. Todo empezó muy padre y terminó de manera extraña... Solo espero no sea un adiós definitivo, y efectivamente sea un "Hasta Luego"...

Días atrás me expresó necesitaba tiempo. Quería nos distanciáramos un par de meses. No me supo decir exactamente el por qué y eso me generó miedo... Solo me dijo que quería tiempo para ella y después volvería conmigo. Le expresé que aceptaba eso, sin embargo, no estaba seguro si era lo que quería... Y la extrañaría y me pondría triste. Le dije que tendría miedo de que al final no regresáramos juntos como ella decía, por x o y motivo.

El día de ayer volvió esa platica a nuestras bocas, pero a diferencia de la anterior vez, en esta ocasión ella me explicó todo lo que pasaba por su cabeza y su corazón. "Ahora lo entiendo" pensé. Le agradecí por platicarlo y decirme/compartirme todo eso. Le expresé lo que sentía y él como la apoyaría respetando su decisión y sobre todo, sus sentimientos. "Quiero que estes bien contigo misma" le dije.

Platicamos cosas y anécdotas de la vida. Sobre todo ella. En algún momento me cuestiona el por que no le platico algo. Ella se siente "muy perica" y solo habla de ella. Le respondo que está bien. Que me platica todo eso porque queria compartirlo conmigo y eso está bien. Yo soy feliz escuchandola. Me alegra conocer más de ella gracias a sus anecdotas. Ahora entendía más cosas de ella.

Ella tiene que irse, pero no la dejo ya que la detengo con algunos besos. Besos que se convierten en caricias en todo el cuerpo. Por algún motivo terminamos en su habitación, sin embargo nada se concreta. Siento en ese momento no estamos conectados. Le cuestiono algunas cosas y me responde con temas delicados... empezamos de nuevo a decirnos cosas que vienen desde dentro. Cosas que no creí tuvieran tanta relevancia (error mío claro... si lo es). Entre tantas cosas que hablamos, y yo solo observando su silueta mientras ellas se mira al espejo, me siento un extraño a esa escena... "¿Qué estoy haciendo aquí?" me pregunto.

Discutimos un par de temas que creí ya estaban solucionados. Como siempre son malentendidos. Desde hace un rato me siento un desconocido. No pertenezco a ese lugar... no en ese momento. Me siento vulnerable. Siento que no existo... y solo decido irme sin decir más... "Ya me voy" le digo, a lo cual salgo de su habitación y salgo del departamento sin decir más. Llego a mi hogar, entro a mi cuarto y me aviento a la cama. Automáticamente apago mi celular porque no quiero saber nada del mundo. Me quedo dormido minutos después...

Al día siguiente, enciendo mi teléfono. Tengo un whats. Algo dentro de mí me gustaría que fuese un mensaje de Gerardo diciendo cualquier tontería, pero efectivamente es un mensaje de ella. Otra vez poniendo final a nosotros mediante un mensaje. ¿Por qué siempre tiene que ser por mensaje? ¿Por qué nunca podemos decir todo eso en persona? Quizás porque si hiciéramos eso, se haría real... ¿Tenemos miedo a que se haga real acaso? No lo sé.

Todo el día estuve confundido, con coraje conmigo mismo, preguntándome el por qué había actuado así... No quería contestar su mensaje... no estaba seguro de si debía o no hacerlo. La tristeza del día me llevó a dormir toda la tarde. Ya en la noche, más tranquilo y con la cabeza fría me dispongo a contestarle y disculparme. Es un mensaje de "Hasta luego" de mi parte. Diciéndole lo que siento, lo que pasó por mi cabeza, pero sobre todo, implorando que trabaje en ella misma. 

"Solo quiero estes bien contigo misma, y como mencionaste, regreses a ser esa Griselda que hacía cosas con entusiasmo y dedicación. Porfa trabaja mucho en ti, dedícate a eso de hoy en adelante. Si más adelante, llegáramos a cruzarnos y pasara algo entre nosotros, estaria super chido, pero igual si no pasa, me dará mucho gusto saber que al menos recuperaste todo eso y estás bien contigo misma y con la gente que te rodea.

Creo no tengo nada más que decir. Ni tampoco quiero una respuesta jaja. Solo es lo que pienso y siento en este momento. Quiero la próxima vez que nos veamos ( y no en sentido de encontrarnos en el elevador ) me mires a los ojos y me digas que todo está bien contigo y que recuperaste eso que te hacía falta...

Te quiero mucho Gris. Te mando un abrazo y un besito en esos cachetitos de Gecko Lunar."

Y me pregunto una vez más... ¿Acaso los Geckos Lunares pueden ser felices fuera de la Luna?

No hay comentarios:

Publicar un comentario