Llevo 2 noches seguidas soñando con ella de nuevo. Pensé había quedado en el pasado... la verdad lo ignoro. A veces creo que vuelve cuando me siento triste o solo (pues es así como me he sentido estos últimos 2 días). La verdad no sé qué pensar del todo.
Por todo este tiempo que ha pasado, no es tanto ese sentimiento de atracción o gusto hacia ella... es más un sentimiento de culpa... enojo conmigo mismo tal vez... Las cosas no debieron terminar así. En estos sueños siempre soy yo, disculpándome con ella. Diciéndole cuanto lo siento.
El sueño anterior a este no lo recuerdo más. Me dejó pensando parte del día de ayer, sin embargo, ya no lo recuerdo... tal vez debí de escribirlo en ese momento como ahorita, al menos lo poco que suelo recordar de estos, sin embargo, no le tomé la importancia necesaria.
Todo comenzó en una escuela. Al parecer tomaba clases de nuevo (y este ha sido un tema recurrente en mis sueños estos últimos años... tal vez extraño la escuela, aunque a decirlo por mis sueños, no es tanto el estudio o el tomar clases del todo... sino la convivencia con más personas). A diferencia de otros sueños, donde me encuentro en la preparatoria, en esta ocasión me encuentro en la universidad.
Específicamente en Ingeniería en Sistemas... lo sé por el tipo de materias, entre ella calculo... mientras camino al aula me pregunto... "¿Por qué tome esta carrera?" y exclamo internamente "¡Odio este tipo de materias!".
Llegamos todos al aula... un gran salón para tan pocos alumnos... no éramos más de 10. El profesor, que se me hacía conocido, le pide a uno de estos que salga de la habitación con la excusa de que siempre venía con una disposición negativa. Volteo a ver al mismo, el cual sin más se levantó de su asiento y se retiró del lugar. Empezó la clase y no entendía nada.
Conforme pasaron los minutos, me empecé a sentir muy incómodo... "¿Qué hago aquí?" me preguntaba. "Tal vez debería de irme como el sujeto que salió al principio". Tome un respiro... no había puesto atención a la clase para nada... o al menos trataba, pero no entendía nada.
Fue entonces que tomé la decisión… Ya no quería estar más ahí… no sé, quizás y hasta me salía de esa carrera. Tomé mis cosas y me salí del Aula sin decir más y me dirigí al sanitario. Al entrar, me encontré con el lugar solo. Me reposé sobre un espejo y un lavabo y mojé mi rostro tomando unos segundos para pensar en todo lo que estaba pasando por mi mente. Salí del lugar.
***Pasó no se cuanto tiempo***
Me encontraba en una cancha de Basquetbol al aire libre. Había algunos amigos jugando en esta. Yo estaba viendo nada más. Todos estábamos esperándola. Tenía mucho tiempo que no la veíamos, y daba la casualidad que venía a la Ciudad a hacer unas cosas en esta ocasión.
Cuando llegó, todos la saludaron de manera cálida. Yo no sabía muy bien que hacer, tenía miedo de su reacción después de todo. Ella había notado mi presencia, pero de igual manera no me había dirigido la mirada o demás. Yo, temeroso, solo veía como todos la saludaban y abrazaban, esperando que todos terminaran.
Cuando todos regresaron a sus actividades (y no entiendo por qué fue así), me acerqué a ella, y decidido a tratarla como si nada, la salude con una sonrisa como siempre fue costumbre a lo cual ella me correspondió de la misma manera. Saludé a su hijo, el cual no podía hablar y la abracé cálidamente. Parecía que el tiempo no había pasado… que todo hubiera estado en perfecto estado, sin ningún malentendido o demás, pero sabía perfectamente que no era así.
Platicamos durante unos minutos. Le mostré mi felicidad al conocer a su familia, diciéndole que me alegraba por ella y por como se veía feliz con su hijo (y esto es algo que realmente me gustaría decirle en la vida real). Nos acostamos en el suelo a platicar un ratito, mientras su hijo jugaba con ella.
Al pasar los minutos, me pidió lo cargara. Siempre he sido muy miedoso para cargar bebes… no me gustan del todo, además que siento soy torpe con ellos y temo por su seguridad en mis manos, pero imposible negarme a esa sonrisa, así que accedí y con todo el cuidado del mundo cargué del pequeño. Mirandolo en mis brazos, me dirigí a ella con voz suave…
“¿Sabes? Estando tu aquí pareciera que nada cambió, que todo sigue igual a cuando
todos estábamos en el mismo lugar, sin embargo, solo con ver lo que tengo en mis brazos
es claro que todo ha cambiado”
Ella se rio mientras yo respondí de la misma manera. Todo había cambiado, sabía tenía que disculparme con ella por todo, pero estando en esta situación tan amena y bonita, no quería hacerlo… tal vez debía esperar.
Terminó la visita, y todos acordamos vernos el día Jueves en la tarde-noche, pues ella partía de regreso a su ciudad el día Viernes. Algo dentro de mí recordó la anterior ocasión, donde no asistí a decir Adiós… no sabía si en esta ocasión podría hacerlo…
Me encuentro en la ciudad, dando vueltas. En transporte o caminando, esperando encontrarla en alguna esquina o lugar, aunque sin éxito. A pesar de toda esa gente y toda esa vida que emana de las calles, establecimientos y demás… no me encuentro del todo identificado. Miro los arboles y los autos. Me siento perdido.
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Me han recomendado buscarla y hablar con ella. No tanto por ella, sino por mí. No se qué hacer realmente, pues es una acción algo Egoísta… ella es feliz y estable, no se por que debería molestarla con mis problemas.
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